No Ficción
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Cristina Jurado El pasado mes de marzo se celebró la novena edición del Emirates Literary Festival (Emirates Lit Fest) en Dubai, EAU, que contó entre sus autoras más celebradas con la presencia de la autora nigeriano-norteamericana Nnedi Okorafor. Después de licenciarse en periodismo en la universidad de Michigan State, y tras completar un master y un doctorado en inglés en la University of Illinois, se graduó del programa para escritores Clarion en Lansing (Michigan) en 2001. Actualmente, a su labor como autora de ficción se suma su trabajo como profesora de literatura y escritura creativa en la University of Buffalo. Esta escritora comenzó a ser conocida a nivel internacional en 2011 tras alzarse con el World Fantasy Award a la Mejor Novela por Who Fears Death. 2016 supuso el año de su consagración, ya que obtuvo los premios Nebula y Hugo por Binti, además del premio Children's Africana Book al Mejor Libro Juvenil por Chicken in the Kitchenn. Sus primeras obras estaban dirigidas al público infantil, como Long Juju Man (Macmillan Africa, 2009) o Iridesssa and the Secret of the Never Mine (Disney Books, 2012), y a adolescentes como Zarah the Windseeker (Houghton Mifflin Harcourt, 2005) y The Shadow Speaker (Hyperion/Disney, 2007). También ha cultivado la literatura juvenil con obras como Akata Witch (Viking/Penguin, 2011), Akata Warrior (Viking/Penguin/PRH, 2017) y The Man, que se publicará próximamente en Nigeria. Lleva desde 2010 escribiendo novelas para adultos, como la mencionada Who Fears Death, así como numerosos relatos en revistas de ciencia ficción y fantasía, una antología de historias (Kabu Kabu, Prime Books, 2013), Lagoon (Hodder & Stoughton, 2014), The Book of Phoenix (DAW/Penguin/PRH, 2015 y precuela de Who Fears Death) y la trilogía de Binti: Binti (Tor.com, 2015), Binti 2: Home (Tor.com, 2017) y Binti: The Night Masquerade (Tor.com, 2018). Una de las características de la obra de Okorafor es su capacidad para integrar mitos y leyendas propias de la cultura Igbo en sus historias de fantasía y ciencia ficción. No en vano esta mujer, que vive en un suburbio de Chicago, ha pasado sus vacaciones con su familia nigeriana. Tuve la oportunidad de entrevistarla en el marco del festival, aunque solo dispusimos de veinte minutos que me supieron a poco porque invertimos algunos en hacernos fotos. Fue así como logré que se fotografiara con la portada de la edición española de Binti, publicada hace un mes por Cronoauta, y traducida por Carla Bataller Estruch. La editorial sevillana, dedicada principalmente a dar a conocer la literatura de ciencia ficción de autoras internacionales, pero que también va a comenzar a apostar por las escritoras españolas, tiene planes de traducir y sacar al mercado el resto de la trilogía. Cristina Jurado: Esta es una pregunta que me ha enviado la traductora al español de Binti, Carla Bataller Estruch, ¿están todas tus historias conectadas? ¿Forman un gran multi-universo? Nnedi Okorafor: La mayoría de mis historias tienden a estar relacionadas entre sí y se sitúan, supongo, en el mismo universo. Muchas veces no soy consciente de lo conectadas que están hasta que, mientras estoy escribiendo, llega un momento que digo «Vale, vale. Este es ese personaje, ese viejo conocido, que aparece para esto». Supongo que sucede porque cada una de las novelas, de las historias, de cualquier cosa que escriba, forman parte de un enorme universo que veo en mi cabeza y, en realidad, lo que hago es contar diferentes historias que ocurren en distintas partes de ese universo. CJ: ¿Estás trabajando en más libros sobre Binti o en su mismo universo? NO: (Risas) Esta es una pregunta muy difícil de responder. Yo diría que posiblemente sí. Cada una de las novelas cortas de Binti llegó de manera inesperada; no las tenía planeadas. No sabía cuándo llegarían hasta que las estaba escribiendo. Ahora estoy trabajando en una novela gráfica que tiene lugar en ese mismo universo pero muchas décadas antes que Binti. En cuanto a historias directamente relacionadas con lo que cuento en Binti… seguramente llegarán. Necesito que las cosas se calmen un poco para ver qué pasa, pero no me extrañaría nada. Dejémoslo así. CJ: ¿Es este uno de tus proyectos inmediatos? NO: ¿La novela gráfica? Sí, es una de las cosas en las que estoy trabajando ahora. CJ: ¿Es esto en lo que estás trabajando ahora mismo? NO: Sí, literalmente. CJ: Esto es después del cómic sobre Black Panther … NO: Sí. CJ: … que, por cierto, fui a ver ayer por la noche, porque sabía que hoy venía a entrevistarte. NO: ¡Oh! ¡Por fin la has visto! (Risas) Es increíble, ¿verdad? CJ: Casi me emociono porque no solo pienso que empondera a las minorías, algo con lo que muchos pueden identificarse, sino también a las mujeres. NO: Sí, a las mujeres. Los personajes femeninos son espectaculares: llenos de complejidad, múltiples, de todo tipo, presentan sus propios arcos argumentales y son significativos. CJ: Me gusta el personaje de T’Challa porque se comporta de la misma manera con y sin el traje. No solo es tímido cuando es va de persona normal: se queda congelado cuando ve a su ex. Me pareció un personaje complejo. NO: Sí, sí. Es un estupendo personaje. CJ: ¿Qué tal fue tu experiencia escribiendo el guión del cómic sobre Black Panther? NO: Es una de esos proyectos que realmente me ha encantado realizar. Tenía muchas preguntas al comenzar, cuestionaba varias cosas… había puntos que quise abordar y sobre los que quise ahondar. Y puedo decir que mi experiencia fue muy positiva. Me gusta T’Challa como personaje. De todos los superhéroes no solo es que pueda identificarme con él, sino que se trata de un personaje que cae bien y sus defectos son normales y creíbles. Es, simplemente, un buen personaje... Continúa en SuperSonic #10, disponible en Lektu y en Amazon
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Por Cristina Jurado sinécdoque: Del lat. synecdŏche, y este del gr. συνεκδοχή synekdochḗ, de συνεκδέχεσθαι synekdéchesthai 'recibir juntamente'. 1. f. Ret. Designación de una cosa con el nombre de otra, de manera similar a lametonimia, aplicando a un todo el nombre de una de sus partes, o viceversa, a ungénero el de una especie, o al contrario, a una cosa el de la materia de que estáformada, etc., como en cien cabezas por cien reses, en los mortales por los sereshumanos, en el acero por la espada, etc. Real Academia Española © Todos los derechos reservados La popularización de las tecnologías de la información (ordenadores, tablets y smartphones), de las herramientas de distribución de información de manera instantánea (Internet), de los motores de búsquedas (Google) y de los espacios dedicados a la interacción (las redes sociales) han facilitado la aparición de nuevas maneras de plantear el otrora solitario oficio de escritor. No es solo que los autores y autoras dispongan a golpe de click de la capacidad para documentarse y enviar sus manuscritos a su editores, sino que ahora pueden establecer un contacto directo con sus lectores y con otros autores. Gracias a ello, han surgido iniciativas como la auto publicación, una nueva forma de distribución de la obra que adopta el modelo de direct-to-consumer que muchas empresas tradicionales ofrecen a sus clientes buscando: utilizar los canales de comunicación ofrecidos por las nuevas tecnologías para brindar una mejor experiencia; establecer, mantener y controlar la imagen de marca; responder a las necesidades planteadas por la clientela de manera rápida y efectiva. Surgen así los colectivos de autores y co-ops o cooperativas de autores, en los que un grupo de escritores y escritoras se organizan para unir esfuerzos que reviertan en un sistema de producción optimizado. En España es un modelo poco implantado y solo existen algunos ejemplos de asociacionismo con agrupaciones enfocadas a ofrecer servicios a los autores, desde a la Asociación de Escritores Nóveles AEN (nacida en 2006), a la Sociedad Cooperativa de Escritores Independientes (creada en 2016). Estas asociaciones proporcionan servicios editoriales, asesoría legal y de marketing y plataformas de networking entre sus afiliados, pero no contemplan la producción colaborativa. Sinécdoque nace en abril de 2018 como un sistema enfocado más hacia el lector y en el que varios escritores y escritoras fundan un laboratorio creativo para compartir ideas. Este espacio permite repartir las tareas de edición, corrección, marketing, difusión y las relaciones con los lectores, para suministrar textos de ficción, en este caso de literatura de ciencia ficción, fantasía y terror, y de distintos estilos a un precio muy asequible y con una periodicidad pre-fijada. El servicio se contrata a través de una suscripción gestionada por una plataforma de micro-mecenazgo, lo que les proporciona una vía rápida y directa de financiación. Inaugurado el pasado 15 de abril, no hemos querido dejar pasar la oportunidad de conocer mejor su funcionamiento y objetivos, y los 7 componentes del grupo han tenido la amabilidad de responder a nuestras preguntas con una celeridad y generosidad que agradecemos desde aquí. En palabras del colectivo: «las respuestas a estas preguntas son un resumen combinatorio de las opiniones y experiencias de cada miembro de Sinécdoque. Al fin y al cabo, los siete somos solo eso: siete partes de un todo, un proyecto común con un espíritu único, pero voces diferentes, opiniones diversas y personalidades distintas. Un estupendo caldo de cultivo, si me permitís el símil». Cristina Jurado: ¿Qué es Sinécdoque y quiénes lo forman? Sinécdoque: Es, más que un grupo de escritores, una idea. Es ganas de aprender, compartir, de superarnos. Y sobre todo, de divertirnos. Los componentes de esta locura somos 7 autores: Alicia Pérez Gil, Rafael de la Rosa, Nieves Mories, Leticia S. Murga, Jorge Sosa, Jorge Fuentes y Virginia Buedo. Visto desde fuera, Sinécdoque es una plataforma de lectura que ofrece cuatro relatos al mes por un dólar. Visto desde dentro, es un maravilloso grupo de personas que se mueven en espacios diferentes de la literatura de género y trabajan en común para llevar los relatos de cada uno desde la corrección a la excelencia. CJ: Sinécdoque nace en abril de 2018 después de gestarse durante 5 meses. ¿Cómo surgió esta iniciativa? S: A Alicia la idea le rondaba desde hace más tiempo, pero la verdad es que salió a la luz en noviembre de 2017 en un hilo de Twitter. Se hablaba de varias cosas, entre ellas de si la opción de auto-publicar era mejor o peor que la de publicar con una editorial tradicional. La posibilidad de montar una plataforma que funcionara como un «Netflix de autores» surgió como la tercera en discordia. Hubo muchas personas que se interesaron por ella. Entre ellos nosotros siete. Para Nieves, al parecer, esto fue algo más «personal». Según ella: «Conmigo contactó Alicia Pérez Gil en la Hispacon. Nos tomamos un café (detrás de otro) y me habló de cierto proyecto al que le daba vueltas: algo parecido a un Netflix de relatos. Como esta mujer es capaz de convencerte de cualquier cosa, me lió. O me lié yo sola. Después de un tiempo ya había conseguido reunir al grupo de incautos que componemos Sinécdoque y bueno, aquí estamos. ». En cualquier caso, en un par de días juntamos una propuesta muy chula y un calendario de trabajo agotador. Ambas cosas nos han traído hasta aquí. CJ: ¿En qué se diferencia Sinécdoque de otros proyectos de micro-mecenazgo a autores? S: Algo que creemos que nos diferencia del resto de proyectos es la cantidad de contenido que entregamos. Por un dólar se reciben cuatro relatos de calidad y minuciosamente corregidos, de autores diferentes. Hay, por tanto, mucha variedad y mucha calidad. Al ser siete autores existen muchos puntos de vista. La autocrítica es complicada, pero la crítica constructiva no: eso nos obliga a dar lo mejor y no lanzarnos a la primera locura que se nos ocurre o a publicar lo que se nos pase por la cabeza. Cada uno aporta un punto de vista diferente y eso se traduce en relatos variados; puede que no te llame demasiado una temática, pero siempre tendrás otra para elegir. Con Sinécdoque queremos romper mitos acerca de la escritura y una de esas falsas creencias es que la escritura es un oficio solitario: nosotros funcionamos como una maquinaria con los engranajes bien engrasados. Somos un equipo de escritores trabajando hacia una meta común. CJ: ¿Cómo organizáis el trabajo? S: Nos organizamos con Trello y trabajamos en Google Drive. Cada escritor entrega un relato cada 7 semanas y, entre el resto del equipo, lo corregimos dos veces y lo preparamos para su publicación. Nuestro proceso consta de las siguientes fases: Entrega del relato, primera crítica, corrección 1, segunda crítica, corrección 2, creación de la portada y maquetación. A nivel interno tenemos asignadas algunas tareas generales necesarias para el correcto desarrollo del proceso: hay gente que se encarga del calendario, gente que se encarga del marketing, etc. Todo se trabaja en un Drive compartido, con lo que todos vemos los comentarios de todos. Cada semana de crítica se convierte en un foro en el que los seis no-autores destripan y proponen mejoras al relato del o la compañera. Cada semana de corrección, el autor se dedica a resolver todos los comentarios, pulir y reescribir. Somos muy exhaustivos y eso nos permite aprender mucho los unos de los otros. CJ: ¿Qué objetivos os planteáis? S: Tenemos muchas ideas, pero la primera es «Conquistar el Mundo», por supuesto. ¿Qué si no? Aunque luego, a corto y medio plazo, nuestros objetivos son bastante simples. Por un lado, queremos ofrecer trabajos de literatura de género de calidad y muy económicos para que todo el mundo pueda acceder a ellos. Pero también queremos demostrar que la profesión de escritor no es obligatoriamente solitaria. Todos aprendemos cada día de las opiniones y los trabajos de los demás, y eso nos hace mejorar como escritores. Por supuesto, nos encantaría poder vivir algún día íntegramente de la literatura, un objetivo a largo plazo. Por otra parte, tenemos muchos planes, algunos muy grandes que aún no podemos, pero nos gustaría poder ofrecer antologías de Sinécdoque en formato físico y es una de nuestras metas más cercanas, tener «reuniones» con algunos de nuestros mecenas, ofrecer ciertos servicios editoriales y se habla, incluso, de una novela a 14 manos. Aún tenemos que perfilar mucho esas ideas y también nos gustaría escuchar qué quieren nuestros seguidores para poder tenerlo en cuenta. Cuando todo esto funcione, podremos centrarnos en lo que será el producto estrella de Sinécdoque: los culondarios. CJ: ¿Cómo se reparten los beneficios que se consiguen mediante el servicio de mecenazgo? S: A partes iguales. Todos aportamos el mismo esfuerzo y todos nos damos lo mejor. ¿Por qué iba a ser de otra manera? Aunque antes de que haya reparto de dividendos, nuestra prioridad es reinvertir los mismos beneficios en ofrecer más literatura. Tenemos varios proyectos de publicación en papel para poder llegar a mucha más gente y que los lectores interesados tengan algo nuestro que poner en sus estanterías. Pero lo que no se reinvierta se repartirá equitativamente. CJ: ¿Cómo creéis que este tipo de proyecto literario colaborativo puede influir en la situación actual de la ficción en nuestro país? S: Esperamos enseñar a la gente que escribir de forma colaborativa es algo hermoso; pero sobre todo posible. Y deseamos que, en un futuro, empiecen a salir más proyectos en los que prime la colaboración. De todas formas, no está claro que lleguemos a influir en algo (ojalá lo hagamos) pero, si hay algo que nos gustaría a todos es contribuir a la creación de comunidades, abrir vías de comunicación. Ayudar a mejorar a otros, dejar que esos otros nos ayuden. Comernos un poco el ego y aceptar críticas desde el primer momento. Somos compañeros de profesión y, si dejamos a un lado la competitividad que muchas veces se respira en ambientes literarios, todos podemos aprender y enriquecer nuestro trabajo a nivel literario y nuestra vida a nivel personal. Sería genial, en definitiva, que Sinécdoque fuera el principio de un nuevo modelo de literatura cooperativa, pero solo el tiempo dirá si lo conseguimos. También nos gustaría que Sinécdoque se convirtiera en un punto de referencia para la literatura de género que habitualmente es tan maltratada por los grandes grupos editoriales. Aquí, Alicia quiere decir una cosa a nivel personal: «hay que cambiar el mundo, de cuajo, de raíz. Si en noviembre me llegan a decir que estaría ahora, en abril, trabajando codo con codo con otras seis personas en algo como Sinécdoque no lo habría creído. Sin embargo lo estoy haciendo. Es mi obligación, y un deseo de los siete, hacer cosas imposibles. Porque las posibles ya las hace todo el mundo». CJ: ¿De qué manera os gustaría ser recordados en el futuro? S: Nieves nos da un epitafio deseado: «Le gustaban el amor, la gente muerta y las cursivas para dar énfasis. A sus compañeros no les quedó otra que aceptarla tal cual». Los demás creemos que tenemos suerte. Suerte de poder trabajar en lo que nos gusta, suerte de hacerlo con personas que aman esta profesión, con los que hemos conseguido un sistema de trabajo con el que nos sentimos cómodos, que nos ayuda a mejorar cada día y que, además, está formado por amigos. Así queremos que nos recuerden, como 7 escritores que dieron un giro al modelo literario del país. Es un sueño grande, pero estamos dispuestos a trabajar muy duro para lograrlo. O, en otras palabras «Esa panda de autores que nunca se murieron». Por Cristina Jurado Fantástica Ficción es uno de los blogs más interesantes del actual paisaje cibernético, con 6 años de andadura ofreciendo noticias, entrevistas y reseñas sobre las novedades más interesantes de la literatura de ciencia ficción, la fantasía y el cómic. Lo gestiona María Leticia Lara Palomino, ingeniera técnica en informática de gestión e ingeniera superior en ingeniería industrial, y ávida lectora que lleva años en contacto con otros lectores, intercambiando opiniones, analizando obras e impulsando la literatura de género en nuestro país. Su labor no se limita a publicar en su blog: ejerce como lectora cero para algunos de los autores más importantes del panorama, ha sido panelista en convenciones nacionales e internacionales, colabora con publicaciones (nos os perdáis su sección “Reconocimiento Digital” en nuestra revista, dedicada a ofrecer semblanzas de los autores y autoras más destacados) y otros blogs, realiza presentaciones de libros, y ha editado obras icónicas como WhiteStar o Alucinadas (ambas para Palabaristas), que ha ayudado a visibilizar a las autoras en español. Como una de las pocas blogueras que reseña literatura de ciencia ficción en nuestro país, hemos creído importante “someterla” a una dura batería de preguntas, que ha sorteado airosa. Desde aquí queremos agradecer que nos dedicara parte de su tiempo para ayudarnos a conocerla un poco mejor. Cristina Jurado: ¿Cómo te iniciaste en la literatura de ciencia ficción, fantasía y terror? María Leticia Lara Palomino: Supongo que como en muchos otros casos, la culpa la tuvo la biblioteca. Recuerdo ir casi todos los días a sacarme dos libros y que el bibliotecario ni siquiera me pidiera ya el carné porque se sabía mi número de memoria. Allí leía tebeos y libros pero siempre me llamaban más la atención los de fantasía, con esas portadas de dragones y otros seres míticos. Creo que era un poco pequeña para darle fuerte a la ciencia ficción, que a la postre terminó siendo mi género favorito. Cuando ya acabé prácticamente con todos los libros de la biblioteca (esto es verídico) mis padres se apuntaron al Círculo de Lectores, “para que la niña tenga algo que leer” (sic), y allí descubrí a Asimov, con una colección que todavía conservo. Fue como una revelación para mí. Ahora se podrá discutir sobre su valía como escritor, pero con esa edad, unos trece o catorce años, me marcó mucho. CJ: ¿Cuáles son tus autores nacionales e internacionales favoritos y por qué? MLLP: Esto sin duda es una pregunta trampa. Admiro a muchos autores, sobre todo porque me encantaría tener esa imaginación y esa capacidad de volcar mis ideas en un texto. Es injusto mencionar solo unos pocos, seguro que me dejo muchos por el camino, pero los primeros que me vienen a la mente son: Iain M Banks, por redefinir la space opera y crear la Cultura; Ada Palmer por establecer un nuevo escalón de calidad en el género; Alastair Reynolds por ser tan bueno en las distancias largas como en las cortas; Aliette de Bodard por ser simplemente como es… ¿Cuántas palabras decías que podía tener la entrevista? Me van a faltar. En cuanto a autores nacionales, siento especial predilección por Javier Negrete, aunque ya haya cambiado de género, y Félix J. Palma por ser tan bueno en los relatos. Felicidad Martínez se va superando obra a obra. Pero me queda tanto por descubrir… CJ: Cómics, novelas, novelas cortas, antologías… si tuvieras que elegir una obra de cada formato, ¿cuál elegirías y por qué? MLLP: Continuamos para bingo con las elecciones difíciles. En el cómic mi preferencia es el europeo, aunque también tuve mi etapa marvelita, como bien me recuerda Pablo (mi marido) cada dos por tres. Restringiéndonos a la ciencia ficción, creo que Valerian es una lectura maravillosa, por su desbordante imaginación. Tiene altibajos, pero me da igual. En el salón de mi casa hay un poster de la portada de Los Héroes del Equinoccio, así que imagínate. De las novelas que más huella me han dejado últimamente escogería Too Like the Lightning, de Ada Palmer junto con Seven Surrenders. No es trampa, es que forman una sola novela truncada por sugerencia del editor. Tiene tantas ideas y está escrita de una forma tan brillante que resulta inquietante (cuando no humillante para el resto de los mortales) el hecho de que sea su primera obra. En cuanto a novela corta, mi favorita es quizá algo antigua, pero la releí hace poco y me sigue pareciendo extraordinaria. Se trata de Diamond Dogs de Alastair Reynolds (título inspirado por tu admirado Bowie) que es capaz de mezclar investigación arqueológica con un Big Dumb Object, con unos personajes arrolladores y un misterio. Un ritmo endiablado, una prosa brillante… Lo tiene todo. Y para romper un poco la tónica, me gustaría decir que la mejor antología está todavía por hacer. ¿Te atreves? CJ: No es lo mismo escribir crítica literaria que reseñas. ¿Qué te ha hecho inclinarte por lo segundo? MLLP: Principalmente que no tengo los conocimientos para hacer crítica, mientras que para hacer reseñas, al menos como yo las entiendo, sí me creo capacitada. Leer una reseña debería ayudar a decidir si se quiere o no leer un libro y para eso creo que el reseñador debe esbozar unos trazos certeros y tener unos gustos más o menos definidos. El que lea la reseña entonces sabrá a qué atenerse. CJ: ¿Cuándo y cómo nació Fantástica Ficción? ¿Por qué elegiste ese nombre? MLLP: Nació en un puente de diciembre de 2012. Yo había sido colaboradora de Cyberdark, pero mis circunstancias personales me habían alejado del “mundillo”. Me di cuenta de que podía contribuir a la conversación, colaborando con mi pequeño grano de arena y decidí intentarlo. Podría decirse que mi principal inspiración fue Sense of Wonder y de hecho es innegable la semejanza entre ambos blogs, aunque el de Elías siempre ha sido mejor. Mi reto es conseguir parecerme a él, pero con mi propia personalidad. Hubo personas que me ayudaron desde un principio. Mi amigo Manuel Moreno, (@trecebits), me ayudó haciendo brainstorming para escoger el nombre y gracias a sus conocimientos el blog es algo mejor. Mi amigo Daniel Cabrera (@sevanagloria) alojó el servicio y se ocupa de aspectos técnicos. Los miembros de los Fantascópicos hacen que tenga conversaciones que resultan en artículos del blog. Compito con Marcheto (@cuentosalgernon) pero la verdad es que la idea de los pasatiempos es suya y solo suya. Mi principal colaborador, Antonio Díaz (@mertonio) es un acicate constante cuando me siento algo desanimada (también nos pasa, no somos máquinas de publicar). Y sin duda alguna mi principal apoyo es Pablo Luján (@pablolujan77) que tiene que aguantar todos mis rollos (sean del blog o no). CJ: ¿Cómo gestionas el blog? ¿Cómo seleccionas las noticias y las obras que reseñas? MLLP: Tengo en feedly una serie de blogs y recursos donde voy seleccionando las noticias y estoy atenta a twitter sobre todo para las ofertas. La selección es un poco personal, publico las noticias que me gustaría leer en otros sitios, así que su interés es variable para los demás. Me gustaría poner más en valor las portadas de los libros, porque es un elemento que “entra por los ojos” y al que creo que no se hace justicia habitualmente, pero me faltan herramientas y conocimientos sobre diseño. Otra cosa más en la lista de pendientes. En cuanto a los libros que leo, intento ampliar lo que puedo mi campo de acción, aunque siempre me van quedando cosas en el tintero (electrónico, aquí somos muy modernos). Yo leo por placer, no por imposición, así que lo mismo salto de un libro de fantasía épica recién salido del horno a una space opera ochentera. Es cierto que a veces me afecta la tiranía de las novedades, pero por lo general intento picar un poco de todo. Como dije en un panel en el que estuve, “I chose randomly”. Creo que desde entonces me miran raro. CJ: ¿Cuándo y cómo empezaste a colaborar con los VerdHugos? MLLP: Sicilia, 1914… Esto… España, abril de 2014. Unos inocentes podcasters invitaron a una tal Leticia Lara a hacer un especial en su programa sobre Iain M. Banks. Lo que no sabían esos pobres creadores de contenidos es que la invitada no se iba a ir de allí ni con agua caliente, agarrada como una lapa al micrófono. Y así fue como comenzó. Me hicieron el honor de invitarme (a mí, que era fan) por mis dudosos conocimientos sobre la figura de Banks y se ve que les gusté, y siguieron invitándome. He intentado ayudar en todo lo posible (con el objetivo de que no se den cuenta de que sigo yendo y no me echen), hace poco he empezado a hacer yo la edición y la conducción del programa. Para mí es todo un honor y un privilegio, así que espero seguir mientras me deje el cuerpo, el cerebro o una combinación de ambos. CJ: Has realizado incursiones en el mundo de la edición, con Alucinadas y WhiteStar. ¿Cuáles son en tu opinión los retos de editar antologías en nuestro país? MLLP: Las antologías es un formato que no vende, dicen. Creo que el mayor reto es cambiar esa percepción, para que merezca la pena embarcarse en una labor como es editar una antología. Requiere una labor entre bambalinas que desgasta tanto emocionalmente como en otros campos. Espero que, poco a poco, consigamos cambiar esa idea preconcebida. CJ: Es conocida tu estrecha relación con Aliette de Bodard. ¿Cómo comenzó tu relación con ella? MLLP: Está todo recogido en el informe policial de la orden de alejamiento… Pues todo empezó cuando ella ofreció una obra suya para leer por si queríamos nominarla a los Hugo. Me avisó Elías, recibí la obra y me encantó. Empecé a buscar sus libros y cada vez me gustaba más cómo escribía, pero es que además resultó ser muy cercana en redes sociales. Me hizo el honor de ser mi primera entrevistada para el blog, cuando una autora de prestigio como es ella no tendría por qué entretenerse en esas minucias. Y hemos seguido hablando y hablando. Finalmente la conocí en Londres en 2014 y desde entonces hacemos por vernos todos los años. CJ: Otra de tus facetas es la de ejercer como lectora cero para algunos autores. ¿Qué es lo más difícil a la hora de leer un manuscrito como lectora cero? MLLP: Los escritores a los que he ayudado son gente maravillosa, que aceptan la crítica o la puntualización con amabilidad, así que en ese aspecto no he tenido problema. Yo leo de varias formas simultáneamente. Por una parte, veo los posibles fallos tipográficos así como la repetición excesiva de frases o adjetivos y corrección gramatical. Esto no me cuesta mucho trabajo porque las erratas me “apuñalan en el ojo”, suelen ser bastante evidentes para mí. En otro nivel de abstracción, intento ver si la historia es coherente. Por ejemplo, si los personajes actúan de forma lógica respecto a lo que conocemos de ellos, pero también si tiene sentido científico (dentro de mis conocimientos, claro), en el caso de la ciencia ficción. Me preocupa el ritmo de la lectura y que la historia vaya a algún sitio. En general, me gustaría pensar que ayudo a pulir lo que el autor quería decir, pero como esto es un diálogo entre el escritor y yo, a veces me da la razón y a veces me la quita. CJ: ¿Por qué crees que hay tan pocas blogueras de literatura de ciencia ficción en España? MLLP: Supongo que será un cúmulo de factores. Entiendo que tendrán que luchar contra el síndrome del impostor, algo que creo que nos afecta a muchas. También es cierto que quizá disponen de menos tiempo para dedicarlo a esto, que al fin y al cabo es una afición. Puede ser simplemente que sus gustos sean otros o que prefieran la inmediatez de las redes sociales (dicen que los blogs son cosa del pasado). En todo caso, yo las animo. Cuando empecé con Fantástica Ficción no creía que fuera a tener repercusión ni que me fuera a leer nadie. Repercusión, lo que se dice repercusión, sigue sin tener, pero me ha permitido conocer a gente maravillosa que comparte mis gustos. Y estas amistades son el mayor premio que me puedo llevar por un poco de esfuerzo. CJ: ¿Cómo ves el actual panorama de la literatura de género en nuestro país? MLLP: No conozco los entresijos del mundo editorial, así que será una opinión más fundada en impresiones que en hechos constatados. Veo que hay muchas editoriales que intentan hacerse un hueco y que publican cosas interesantes, pero no sé si son económicamente viables. Se publica bastante más que hace unos años, aunque no sé si se vende todo lo que se publica. Veo que se sigue traduciendo mucho y lo entiendo, porque es una apuesta menos arriesgada que publicar a un autor español. Lo extranjero vende, por alguna extraña razón. La presencia de revistas puede ser la cantera para el escritor de relatos que luego puede dar el salto, si lo desea, a escritor de novelas. Por mi parte voy a intentar leer más en español, que es una de mis asignaturas pendientes. Quiero agradecerte que me hayas brindado esta oportunidad y espero que estas respuestas hayan resultado de interés para los lectores. ¡Nos vemos en las redes! |
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